Un hombre que camina
solitario entre mucha gente
Una figura sin rostro
una imagen aparente
Un rostro sin nombre, sin voz
distante, frío, indiferente.
Abre sus ojos un día y descubre
que, a su alrededor,
se mueve todo un universo de personas.
Que no está solo.
Que hay otros intereses
aparte de sus propios intereses.
Que es algo más que una figura.
Que tiene un rostro definido
y tiene un nombre y tiene voz
Y la gente, a su alrededor, grita
¡ALELUYA!
Y él exclama ¡PUEDO VER!
Abril, 1997
viernes, 27 de abril de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario